¿Cómo embalar una vajilla para mudanza?

Cuando afrontas una mudanza, hay una serie de artículos que, por su fragilidad, precisan de un cuidado especial para evitar riesgos durante el transporte y hay que proteger debidamente. Y, uno de ellos es la vajilla, que además de frágil, contiene una gran cantidad de productos como platos, vasos y copas que es recomendable proteger de forma individual para asegurar que llegarán en perfectas condiciones a tu nuevo hogar.
Esto nos lleva a la siguiente pregunta: ¿cómo embalar una vajilla para mudanza?
El transporte de una vajilla sin el embalaje adecuado puede aumentar el riesgo de rotura durante el transporte, ya que, dada la fragilidad del cristal o de la loza, que son los dos materiales más utilizados para las vajillas, cualquier mínimo golpe podría provocar roturas, astillamientos u otros daños que, además de una pérdida económica, también podrían tener una gran pérdida a nivel sentimental, especialmente si se trata de una vajilla heredada o regalada por una persona especial.
Por ello, saber cómo envolver una vajilla para mudanza correctamente es fundamental, y te adelantamos que deberás dedicarle más tiempo y atención que a otros artículos.
Conscientes de su importancia, en Cajeando te vamos a contar cómo embalar platos y vasos para mudanza paso a paso, así como los materiales y métodos que deberás utilizar para garantizar la integridad de cada pieza.
¿Cómo embalar platos y vasos para mudanza correctamente?
Antes de contarte cómo embalar vajilla y cristalería, te vamos a indicar qué materiales necesitarás:
- Cajas de cartón resistentes.
- Plástico de burbujas.
- Papel para relleno.
- Separadores de cartón.
- Cinta adhesiva para precinto.
- Etiquetas.
- Tijeras o cúter.
Utiliza cajas de cartón resistentes y prepáralas
En Cajeando disponemos de cajas de cartón para mudanzas altamente resistentes, perfectas para guardar vajillas, que proporcionarán la protección necesaria durante el transporte, fabricadas con cartón de la más alta calidad.
Contamos con diferentes packs de mudanza para que puedas escoger el que más te convenga, no solo para embalar tu vajilla, sino también el resto de artículos y productos.
Dada la fragilidad de las piezas, para la vajilla recomendamos utilizar cajas de cartón pequeñas, para que así quede el menor espacio posible entre las piezas y el cartón, lo que aumentará la protección.
También recomendamos reforzar el fondo de las cajas, colocando cinta adhesiva adicional en la base para evitar que pueda abrirse debido al peso, y crear una capa de amortiguación con papel de burbuja.
Embala cada pieza de forma individual
Una de las claves es embalar cada pieza de la vajilla de forma individual con papel para relleno, asegurándote de que quede perfectamente envuelta. De esta forma, evitarás que puedan rozar entre sí.
- Platos: coloca el plato en el centro del papel y envuélvelo.
- Vasos, copas y tazas: rellena el interior con papel para fortaleceros, y asegúrate de cubrir bien el tallo y la base.
Por nuestra experiencia, lo ideal es no cargar las cajas en exceso, de ahí que las cajas pequeñas sean las más adecuadas. Así mismo, también recomendamos utilizar una caja para guardar los platos, otra para las copas, otra para los vasos, etc.
Coloca con cuidado
Una vez las piezas están bien envueltas, debes colocarlas en el interior de la caja con cuidado y de forma adecuada, ya que de cómo vayan posicionadas dependerá que lleguen en buen estado a su destino.
- Platos: coloca los platos envueltos, uno encima del otro, creando una pila, como si estuvieran en un estante, para así distribuir mejor el peso y evitar que se rompan.
- Vasos y copas: colócalos en posición vertical, utilizando separadores de cartón entre ellos para evitar que se toquen.
- Tazas: pon las tazas con el asa hacia el centro de la caja para protegerla.
Rellena los espacios vacíos
Una vez hayas guardado todas las piezas, rellena los espacios vacíos con plástico de burbujas, para que así todo quede perfectamente fijado y no se mueva durante el transporte, reduciendo cualquier mínimo riesgo.
Lo idóneo es que coloques una capa de plástico de burbujas en la parte inferior de la caja, para que así las piezas de la vajilla no estén en contacto directo con el cartón y estén protegidas en caso de que se abriese la caja, y que te asegures de cubrir todos los posibles huecos que puedan quedar entre las piezas y las paredes de la caja.
Así mismo, antes de cerrar, coloca una capa de amortiguación en la parte superior.
Precinta la caja
Lo siguiente es sellar bien las cajas con cinta adhesiva o precinto para evitar que puedan abrirse durante el transporte o manipulación de las mismas.
Cierra la caja y coloca la cinta adhesiva sobre las solapas para asegurar que queden unidas. Te recomendamos aplicar varias capas de cinta para reducir riesgos.
Advierte de la fragilidad
Por último, es importante colocar unas etiquetas para advertir de la fragilidad del interior, lo que permitirá que los encargados de transportar las cajas sean conscientes de que deben llevar un mayor cuidado.
En Cajeando disponemos de etiquetas autoadhesivas para marcar cajas o paquetes que transporten materiales frágiles, como la vajilla, que ayudarán a indicar que el contenido es altamente sensible.
Con todos estos tips, ya sabes cómo empacar vajillas para mudanza y, en Cajeando encontrarás todo lo necesario para garantizar que todas las piezas estarán perfectamente protegidas y llegarán intactas a tu nuevo hoga